Fuerzas oscuras y amenazas latentes

Bajo las rutas y banderas de Aldaryen laten fuerzas que no responden a ningún reino. Algunas nacieron con el Imperio Valtherium, otras son anteriores a toda memoria. Todas comparten algo: no están derrotadas, solo esperan un momento de debilidad para alzarse.

Nigromantes Negros

Temidos por su dominio sobre muerte y sombra, los Nigromantes Negros aparecen cíclicamente en las crónicas, ligados al colapso del Imperio y a diversas guerras sin fecha unánime. Su estructura es difusa: círculos, discípulos y pactos con entidades que nunca se nombran en público. Su influencia persiste en cultos menores, reliquias prohibidas y linajes malditos.

Páramos de Aen-Thul

También llamados la Tierra Maldita, los Páramos albergan facciones caóticas y clanes transformados que rechazan cualquier forma de orden. Entre sus ecos se menciona el Pacto del Eco Negro, alianzas inhumanas y jefes de guerra que hablan con voces que no son suyas. Muchos eruditos consideran que lo peor de Aen-Thul no es lo que vive, sino lo que despierta cuando se pronuncian ciertos nombres.

Islas de Obraen y los Piratas Juramentados

En el oeste, Obraen es refugio y amenaza a la vez. Sus capitanes sellan juramentos arcanos que los atan a la tripulación y a algo más profundo que el mar. Según los puertos, han combatido tanto a reinos como a Nigromantes, guiados por códigos que nadie de tierra firme comprende. El juramento protege, pero también cobra.

Herencias del Imperio

La caída de Valtherium dejó tras de sí dos peligros persistentes:

• Niebla de Bronce: una peste mágica que no siempre mata, a veces altera. Rebrotes esporádicos se documentan en zonas de ruinas y criptas selladas.
• Artefactos y cripta-memorias: dispositivos imperiales aún activos que distorsionan memoria y voluntad. Muchos han sido reutilizados sin comprender su coste.

Fenómenos anómalos

En varios puntos del continente se registran alteraciones del tiempo y del mapa:

• Mareas inversas en las costas de Obraen, decisiones que se repiten como si el día se reescribiera.
• Días que duran minutos y estaciones mezcladas en torno a Pico Cuervo.
• Mapas cambiantes y nombres vedados (Valle del Segundo Sol, Thir-Mellanor) que los cartógrafos evitan plasmar en una sola lámina.

Entidades y rumores

Algunas regiones atribuyen su desgracia a presencias sin rostro: la Madre de Ceniza bajo montañas del este, ciudades hundidas que aún respiran en mares interiores, o el rumor de un dragón-dios dormido cuya espalda sería el propio continente. No hay consenso, solo miedo antiguo.